Los almacenes y las empresas de logística siguen creciendo debido al auge del comercio electrónico. Por esta razón, se demandan puestos de trabajo en grandes almacenes y muchas personas quieren optar a este puesto. 

Pero, ¿qué formación se necesita para trabajar en un almacén? Es la pregunta más recurrente cuando se ofertan este tipo de puestos de trabajo. En este post te explicamos cómo funciona un almacén y la formación necesaria para trabajar en él.  

Un almacén es un local o establecimiento que sirve para depositar o guardar grandes cantidades de artículos, productos o mercancías para su posterior venta, uso o distribución. El espacio del almacén debe ser diseñado y estructurado correctamente de manera que puedan conservarse las mercancías en las mejores condiciones posibles.  

Para que un almacén funcione de manera correcta debe ser capaz de asumir, al menos, las siguientes funciones: 

1. Recepción de productos y/o mercancías. 

Es la primera fase que se da en un almacén: recibir los productos y mercancías y analizarlos. El análisis se refiere a las características del producto: dimensiones, peso, embalaje, buen estado, etc. Así, el mozo de almacén sabrá recibir y preparar la mercancía para ubicarla en el lugar adecuado del almacén. Es muy importante destinar una zona a la recepción de productos y otra a la salida de estos. 

2. Almacenamiento. 

Después de recibir y analizar las características de los productos, los mozos de almacén deberán destinar y adecuar los espacios para su almacenamiento. Un aspecto fundamental es ubicar la mercancía de tal manera que no afecte a las condiciones de las demás o las deteriore. 

3. Conservación y mantenimiento.  

Todos los empleados deberán comprobar y supervisar periódicamente el estado de los productos y mercancías. En este punto también entra todo lo relacionado con la seguridad de las mercancías y la prevención de riesgos laborales de un almacén.  

4. Control y gestión de inventario. 

Los mozos de almacén deberán controlar la mercancía entrante, la disponible y la saliente. De esta manera, habrá una gestión organizada del stock del almacén y así se podrá comprobar siempre de los productos que están disponibles. 

5. Expedición de los pedidos. 

El último paso es la expedición de las mercancías. Para evitar demoras y rupturas de las cadenas de distribución, la expedición de los pedidos ha de ser ágil. Esto se consigue con una correcta organización del almacén.  

La dinámica de un almacén es constante y todos los perfiles que forman parte de la cadena son importantes para mantener el flujo de trabajo activo. A continuación, enumeramos los puestos de trabajo que cubren las necesidades de un almacén y las principales funciones que desempeñan: 

• Jefe de almacén. Es el que controla la entrada y salida de los productos del almacén, el transporte de mercancías, los servicios de transportes y la labor del personal del almacén. 
• Despachador. Controla las cantidades y calidades de los productos y apoya al jefe de almacén.  
• Estibadores. Despacha los productos a los distribuidores, manipulan los productos que entran y salen del almacén, realiza el mantenimiento y la limpieza, etc. 
• Controlador de recepción o de expedición. Se encargan de supervisar los artículos recibidos, pasando la factura correspondiente al departamento administrativo; y de controlar los palets preparados con la mercancía correspondiente de acuerdo al pedido de los clientes.  
• Carretillero. Recoge con la carretilla los palets y mercancías que se encuentran en el muelle o en la entrada. Además, carga y descarga los productos y asegura que todas las zonas están despejadas.  
• Operario de pedidos y mozo de almacén. Se encarga del control del inventario, de las mercancías y de operar con los pedidos de los clientes para que estén listos. También son los responsables de cargar los camiones, ubicar las mercancías y velar por la seguridad del almacén.  

Como hemos visto anteriormente, el personal del almacén debe tener conocimientos básicos sobre los tipos de mercancías, la manipulación de estas, control de inventario, utilización de máquinas como la carretilla para transportar cargas, gestión adecuada del almacén, mantenimiento y limpieza del espacio de trabajo, etc.  

La formación es uno de los aspectos fundamentales para que los profesionales que trabajen en un almacén puedan desarrollar sus funciones. Por ejemplo, un curso de mozo de almacén sirve de gran ayuda para saber gestionar todas las situaciones que puedan aparecer. Por otra parte, un curso de carretillero te forma para que puedas conducir la carretilla elevadora de manera segura y transportar las cargas evitando riesgos.  

Además, para poder manejar la carretilla elevadora o cualquiera de las otras máquinas necesarias en el almacén, es obligatorio tener un certificado de carretillero, que equivale al carnet de carretillero que siempre se ha pedido.  

El mozo de almacén es el perfil más completo de un almacén, pues es el que más funcione puede llegar a desempeñar. El trabajo de mozo de almacén consiste en: 

• Controlar las entradas y salidas de mercancías. 
• Seleccionar y clasificar los productos para su posterior suministro. 
• Almacenar productos. 
• Realizar tareas de mantenimiento en el almacén. 
• Utilizar la maquinaria disponible. 

Por tanto, un mozo de almacén necesita el carnet de carretillero para que pueda conducir los equipos y maquinaria disponible: carretillas elevadoras, carretillas retráctiles, cintas transportadoras, elevadores, etc.  

Existen una serie de requisitos para conducir la carretilla elevadora o el toro y poder trabajar de carretillero. Son los siguientes: 

• Ser mayor de edad.  
• Pasar un reconocimiento médico anual en el que se descarten posibles enfermedades que impidan el manejo de la carretilla. 
• Obtener un certificado de conducción de carretillas, es decir, tener el carnet de carretillero.  

En Academia Tecnas tenemos un curso de carretillero con el que puedes obtener el certificado oficial de carretillero. Nuestro curso está elaborado de acuerdo al Real Decreto 1215/1997, por el que se establecen las disposiciones mínimas de seguridad y salud para la utilización por los trabajadores de equipos de trabajo, por lo que el curso es válido en toda España.  

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